El PP propone la instalación progresiva de medidores de CO2 en las aulas

Pilar Cortés, portavoz popular de Educación, llama a sumar esta herramienta en el lado de la prevención

Zaragoza, 2 de diciembre de 2020.- El Partido Popular registró esta mañana en el Parlamento autonómico una propuesta legislativa dirigida al Gobierno de Aragón para la progresiva instalación de medidores de CO2 en los centros educativos de la Comunidad sostenidos con fondos públicos. “Nuestra idea es, como venimos haciendo desde el inicio de la pandemia, aportar propuestas al Ejecutivo aragonés para reforzar las barreras contra el coronavirus”, explicó Pilar Cortes, portavoz de Educación de los populares aragoneses que planteó que “una vez que los niveles de crisis y estrés en los diferentes ámbitos están bajando y antes de que vuelvan a subir en enero como ya adelantó el propio Gobierno de Aragón, deberíamos centrarnos ahora en la prevención, en la posibilidad de adelantarnos y aumentar la seguridad sanitaria en las aulas”.

La constatación de la transmisión aérea del virus y su alto grado de permanencia temporal en espacios cerrados aconsejan una ventilación constante, sin obviar a medidas ya generalizadas como la utilización de mascarillas o guardar la distancia de seguridad, por lo que “monitorizar los niveles de dióxido de carbono en las aulas, donde puede haber una media de veinte alumnos según los colegios, es una opción que el Gobierno de Aragón debería plantearse en beneficio de la salud de profesores y estudiantes”, explicó Cortés, que abogó por “tomar las medidas más oportunas para mantener la calidad del aire en las condiciones más adecuadas”.

Además, explicó, “la llegada del invierno y la bajada de las temperaturas pueden dificultar seguir manteniendo esa ventilación en las mismas condiciones y con la misma frecuencia y continuidad, con el consecuente empeoramiento de la calidad del aire en las aulas y el incremento en la posibilidad de transmisión del virus”.

Los populares son conscientes de la relevante inversión necesaria para acometer su propuesta, por eso estiman que la implantación debería ser progresiva y de acuerdo a los estudios científicos existentes respecto a la vulnerabilidad de los diferentes grupos de edad. Una inversión que, opinan, se recuperaría al reducir el estrés causado al sistema sanitario público por el tratamiento de la COVID-19, y además ayudaría a generar un mayor grado de confianza en las familias.

Con la adopción de esta nueva medida preventiva el Gobierno de Aragón se sumaría a la iniciativa desarrollada por el Ayuntamiento de Zaragoza en colaboración con la Universidad de Zaragoza para mejorar la calidad del aire en diferentes espacios públicos. De hecho, advierten en el Partido Popular, las competencias en salud pública y educación corresponden a la Administración autonómica “por lo que sería oportuno que el Ejecutivo ejerciera las atribuciones que tiene encomendadas en unos momentos donde puede desplegarlas con mayor efectividad”, apuntó la diputada.

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